Audrey S. Bomberger, R.N., Ph.D
¡Desastre radiactivo! El sólo término trae a la mente imágenes de una devastación irreal. Extrañamente, se piensa en los desastres radiactivos como algo que provoca menos víctimas que las catástrofes masivas. ¿Pero qué hay respecto de aquellas personas que resultan afectadas por contaminación radiológica accidental, es decir, el tipo de accidentes que ocasionan algunas víctimas, cuyas lesiones se complican por la presencia de un bajo nivel de radiación? ¿Qué clase de cuidados requieren? y, ¿Qué preparación se necesita para proporcionar el tratamiento apropiado en este nivel de emergencia radiológica?
Pocos hospitales han tenido que proporcionar servicios y tratamiento a las víctimas de un accidente radiológico en ausencia de una guerra nuclear. Más aún, es poco probable que muchos de los hospitales reciban a personas afectadas en accidentes de radiación lo suficientemente graves como para poner en peligro su vida. Un hecho más frecuente es la posibilidad de que reciban a un paciente con traumatismos comunes, cuyo estado se ha complicado por la presencia de un bajo nivel de contaminación o exposición radioactivo a consecuencia de accidentes de transporte, industrial, minero o provocado por un reactor atómico. Los diversos medios de transporte (ferroviario, vial, aéro y marítimo) utilizados para desplazar radioisótopos y productos de desecho industrial convierten a esta categoría de transportación en la más propensa a sufrir accidentes de este tipo.
La Comisión Mixta Estadounidense de Acreditación de Hospitales (cuya sigla en inglés es JCAH) ha exigido a sus miembros que formulen programas para afrontar desastres atómicos y protocolos de tratamiento a las víctimas subsecuentes.1 De igual forma recomienda que los departamentos de urgencias de estas instituciones busquen personas con experiencia y conocimientos en terminología de radiación, los procedimientos del manejo de isótopos; la detección y evaluación de radiación, para auxiliar en la formulación del plan de emergencia médica para casos de incidentes radioactivas (abreviado en inglés, MREP). Las personas con esta especialidad pueden encontrarse en hospitales en donde siempre se utilicen fuentes de radiación de forma rutinaria (por ejemplo, radiología, medicina nuclear, patología clínica o en los departamentos de terapia con radiación).
Este capítulo provee un marco teórico para desarrollar un plan de emergencia médica en caso de incidente radioactivo (PEMR) para tratar a las numerosas víctimas con este problema. Presentamos los siguientes puntos:
· tipos y fuentes de radiación
· el manejo de una emergencia radiológica
· un sistema de clasificación utilizando el sistema médico estándar e información referente a la radiación para clasificar a las personas que estuvieron en contacto con ésta
· técnicas de descontaminación
· componentes del PEMR
· el curso clínico de la enfermedad aguda provocada por la radiación
Una alumna de primaria que vivía en 1979, cerca de la isla de las Tres Millas, (sitio en donde ocurrió una fuga de radiación de una planta atómica en 1979) definió a la radiación como "algo en el aire que podría matarme".2 Su definición pudiera ser correcta, sin embargo, es la definición de un niño, y necesita ampliarse para el uso de los adultos y los encargados de la asistencia médica.
Radiación nuclear
El término radiación puede utilizarse de diversas formas. La radiación nuclear es la emisión y desplazamiento de energía a través del espacio o de una distancia determinada. Ocurre cuando los átomos inestables se separan o se fisionan y producen partículas más pequeñas e inestables llamadas fragmentos de fisión. El proceso se conoce como desintegración radioactivo, y al producto del cambio se le denomina radiación nuclear.
El átomo inestable que sufre la desintegración radioactivo emite cuatro tipos de partículas: alfa, beta, rayos gema y el neutrón (tabla 7-1)
La partícula alfa es la más grande de las cuatro, aunque también es muy pequeña. Estas partículas que viajan algunos centímetros en el aire, son detenidas por una hoja de papel o por el tejido cutáneo sin lesionarlo, excepto cuando una sustancia que emite partículas alfa permanece por largo tiempo en contacto directo con los tejidos al descubierto; en este caso la radiación puede causar un daño considerable o incluso provocar una enfermedad funcional.
TABLA 7 - 1 Comparación de las partículas alfa, beta y los rayos gama
Radiación |
Distancias que viajan en el aire |
Velocidad |
Partículas Alfa |
3.7 cm |
37 Km/segundo |
Partículas beta |
200-800 cm |
25%-99% de la velocidad de la luz |
Rayos gama |
cientos de metros |
Velocidad de la luz (350 000 km/seg) |
Fuente: NATO Handbook on the Medical Aspects of Nuclear,
Biological and Chemical Defensive Operations, AMedP - 6 Bruseels, Military
Agency for Standardization (MAS), August 1973, p. 2-16. |
La partícula beta más ligera y mucho más pequeña que la alfa, viaja algunos cientos de centímetros en el aire y es detenida por una lámina de madera de una pulgada o una hoja delgada de metal. Puede penetrar 0.33 cm en el tejido corporal y a semejanza de la alfa ocasiona enfermedad funcional en caso de que una emisión importante de ella penetra en el cuerpo y permanezca en él.
Los rayos gama, semejantes a los rayos X, son ondas muy penetrantes e invisibles de energía similares a la luz y a las ondas de radio. Viajan cientos de metros en el aire y son detenidas por una capa gruesa de plomo o de concreto. La exposición a los rayos gama puede ocasionar daños graves.
Los neutrones son partículas aproximadamente del tamaño de un protón. Son producidos principalmente en reactores nucleares utilizados para la investigación o la producción de energía y viajan cientos de metros en el aire. Su curso es detenido por una masa de agua de varios metros de profundidad o un concreto especial. La exposición a los neutrones puede ocasionar radiación en todo el cuerpo similar a la causada por los rayos gama, con la diferencia de que depositan la energía de manera no uniforme.3
Fuentes de radiación
La raza humana ha vivido siempre expuesta a la radiación producida por fuentes naturales. El origen de ésta proviene del sol, las estrellas y otros materiales radioactivos naturales distribuidos en el suelo y las rocas. Cada uno de estos elementos principales, como hidrógeno, potasio, y carbono naturales tienen una pequeña parte radioactivo. El nivel de radiación natural varia de acuerdo con la localización geográfica. Por ejemplo, la dosis de rayos cósmicos se duplica cuando la persona va del nivel del mar hacia las grandes alturas, como las montañas.
Con el creciente desarrollo de la tecnología, los humanos han encontrado una gran variedad de usos a la radiación, los cuales se suman a nuestra exposición diaria. Las partículas emisoras de rayos alfa se utilizan en algunos detectores de humo y en las carátulas de relojes de pulso, de pared y otros instrumentos luminosos. Las partículas beta se emplean en medidores industriales para determinar el espesor de los materiales producidos, como medida de control de calidad, para el tratamiento médico de algunos tumores o lesiones de la piel, y en muchos estudios científicos. Los rayos gama también se aplican en la industria para control de calidad, en los aeropuertos para inspecciones de seguridad y en la profesión médica para estudios de diagnóstico y el tratamiento de diversos procesos de enfermedades seleccionadas.4
TABLA 7 - 2 Variables que afectan la magnitud de la lesión por radiación
No genéticas |
Genéticas |
Dosis y rapidez de la exposición a la radiación |
Edad de la persona |
Tipo de radiación |
Porciones irradiadas del cuerpo |
Tejido expuesto |
Extensión irradiada del cuerpo |
Tipo de radioactividad |
Variaciones biológicas |
Radiación interna/externa |
Efectos de la lesión por radiación
Los efectos de la lesión por radiación no dependen únicamente de la dosis o la cantidad de radiación recibida, sino también de variables genéticas y no genéticas (tabla 7-2).
Un factor no genético que incide en la lesión por radiación es el poder de penetración del material radioactivo. Por ejemplo, los rayos gama y los neutrones producen más lesión, ya que son más penetrantes que las partículas alfa o beta. Otro aspecto por considerar es la cantidad de tejido expuesto a la radiación y si la exposición fue interna o externa. En el primer caso habrá que tener en cuenta la naturaleza radioquímica y la trayectoria biológica.
Los factores biológicos que afectan la sensibilidad en las lesiónes por radiación incluyen la edad de la persona expuesta. La sensibilidad es mayor si los órganos están en etapa de desarrollo, de manera que la radiación daña más fácilmente las células en fases de diferenciación y a las que están experimentando divisiones rápidas. Por esa razón un adulto es más resistente a los efectos de la radiación que un niño de corta edad o un lactante.
Cuando se irradia la porción superior del abdomen los efectos tienden a ser más severos que si se expone cualquier parte del cuerpo de tamaño similar a la misma dosis y durante el mismo periodo. Esta diferencia se debe a la presencia de órganos vitales en la mitad superior del abdómen. La radiación de una porción pequeña de la superficie corporal tiene un efecto general mucho menor que si se aplica una dosis igual a todo el cuerpo. La porción no radiada puede contribuir al restablecimiento de la afectada. Aunque es posible determinar la dosis promedio de radiación que produce algunos efectos, resulta imposible anticipar las respuestas individuales respecto a dicho promedio.4
La sensibilidad relativa de un órgano a la lesión por radiación directa depende de los tejidos individuales que lo componen. La tabla 7-3 incluye una lista de varios órganos en orden decreciente de radiosensibilidad, y con base en la exposición relativamente directa a la radiación.
TABLA 7 - 3 Radiosensibilidad relativa de diversos órganos
Radiosensibilidad relativa |
Órganos |
Alta |
Órganos linfoides, médula ósea, testículos y ovarios, intestino
delgado. |
Moderadamente alta |
Piel; cornea y cristalino; órganos gastrointestinales: cavidad,
esófago, estómago, recto. |
Mediana |
Cartílago en crecimiento, vasos finos, huesos en
crecimiento. |
Moderadamente baja |
Cartílago o hueso maduros, pulmones, riñones, hígado, páncreas,
glándulas suprarrenales, glándula pituitaria. |
Baja |
Músculo, encéfalo, médula espinal |
Nota: Basada en la exposición relativamente directa a la
radiación | |
Fuente: NATO Handbook on the Medical Aspects of Nuclear,
Biological and Chemical Defensive Operations, AMedP-6. Brussels, Military Agency
for Standardization (MAS), August 1973, p.
5-8. |
Para concordar con los términos que se utilizan en otros campos de la ciencia las definiciones de las unidades de radiación están pasando por un cambio. El cambio en cuestión ha sido introducido poco a poco en los Estados Unidos y en otros países. La tabla 7-4 define los términos empleados para medir la radiación.
Dosis máxima permisible
El Consejo Estadounidense de Protección y Mediciones de la Radiación (la sigla en inglés es NCRF) es uno de los organismos que establecen la dosis máxima permisible (DMP) de radiación. Conforme se han obtenido más conocimientos respecto a los efectos de la radiación a través de los años se han cambiado las dosis mencionadas.
Los genetistas han calculado que la dosis promedio anual de radiación para las personas que viven en los Estados Unidos es de 200 millirems por año.4 Dicho promedio no implica de ninguna manera un nivel de dosis peligroso. El CNPR hace recomendaciones especificas para el trabajador dedicado a ocupaciones riesgosas; el socorrista, y al individuo que desempeña trabajos no peligrosos.5 Sin embargo, es necesario realizar todos los esfuerzos para que el nivel de exposición se mantenga lo más bajo que pueda lograrse (ALARA).
Comparación entre exposición y contaminación
Es importante comprender la diferencia entre los términos exposición y contaminación en su aplicación a la víctima de un accidente radiológico. La exposición ocurre en el sitio del accidente y no es transferible. No representa peligro potencial para los socorristas. Sin embargo, las víctimas contaminadas son las que llevan consigo las fuentes de radiación en forma de partículas de polvo o líquido derramado. La contaminación radioactivo puede transferirse a otras personas, objetos o al ambiente. Si existe alguna duda respecto a si la víctima ha sido expuesta o contaminada por radiación habrá que tratarla siempre como si estuviera contaminada.
TABLA 7 - 4 Medidas de radiación
Unidad |
Definición |
milirem (mrem) |
Medida básica de radiación para dosis equivalentes. |
rad-unidad IS = Gray (Gy) |
Dosis de radiación absorbida. Medida de la energía impartida a la
materia por partículas ionizantes, por unidad de masa del material radiado en el
sitio de interés |
rem-unidad IS = Sievert (Sv) |
Roentgen-equivalentes-hombre. La unidad o dosis |
de cualquier radiación ionizante que produce el mismo efecto
biológico que una unidad de la dosis absorbida de rayos X común y
corrientes | |
roentgen (R) (no se utiliza como unidad) IS |
unidad de exposición a los rayos gama o X |
Fuente: Bomberger AS. Dannewfelser BA: Radiation and Health:
Principies and Practice in Therapy and Disaster Preparedness. Rockville, Md,
Aspen Systems Corp, 1984; Saenger EL (course director; Radiation Accident
Preparedness, Washington, DC, Edison Electric Institute, 1981.
|
Tipos de exposición
Se observan cuatro tipos de víctimas en accidentes nucleares:
1. Las que han sufrido exposición externa del cuerpo a la radiación (completa o parcial).
2. Las que han recibido contaminación externa del cuerpo o de las ropas por liquido o materiales radioactivas de desecho.
3. Las que han sufrido contaminación externa del cuerpo, complicada con una herida.
4. Las que han recibido contaminación interna del cuerpo por inhalación o ingestión de sustancias radioactivas.
Las víctimas con exposición externa completa o parcial de su organismo recibieron la exposición en grandes dosis de radiación, pero no representan ningún peligro para quienes las atienden, para otros pacientes o para el ambiente. Este tipo de personas son menos peligrosas que aquellas que se han sometido a radioterapia o a una radiografía con fines de diagnóstico.
Las víctimas de contaminación externa en la superficie corporal o en las ropas por el contacto con líquidos o materiales de desecho presentan problemas semejantes a aquellas que se encuentran infestadas de parásitos. Es necesario poner en práctica las técnicas de aislamiento y limpieza quirúrgicas antes de que el paciente penetre en el área de radiación de la zona de selección de emergencia. El peligro potencial debe limitarse y eliminarse lo más pronto posible.
Las personas que presentan contaminación externa complicada con una herida constituyen un peligro ambiental. Hay que tener cuidado de que no se contaminen los miembros del personal, otros pacientes o el medio. La herida y las superficies vecinas deben limpiarse por separado y ocluirse después de la limpieza. Si la víctima presenta tejido sucio aplastado puede practicársele desprendimiento húmedo preliminar después de lavar la herida.
Las personas con problemas de contaminación interna provocada por la inhalación o la ingestión de una sustancia radioactivo tampoco representan riesgos. Después de limpiar la menor cantidad de material contaminado depositado en la superficie corporal durante la exposición al aire en el que viaja la sustancia, las personas son tratadas como si fueran víctimas de intoxicación por productos químicos. Es necesario reunir los desechos corporales y guardarlos a efecto de medir las cantidades de núclidos para ayudar a determinar el tratamiento apropiado.4
Síndrome de Enfermedad por Radiación aguda
El síndrome en cuestión es consecuencia de la aplicación repentina de una gran dosis de radiación por neutrones, rayos gama o ambos en todo el cuerpo. La reacción fisiológica en los humanos depende especialmente de la dosis. El síndrome de radiación aguda se subdivide en hematopoyético, gastrointestinal y del sistema nervioso central. La tabla 7-5 señala los efectos clínicos agudos en los adultos sanos por exposición a una sola dosis fuerte de radiación en todo el cuerpo.
El curso clínico del síndrome por radiación después de una exposición importante de radiación penetrante de todo el cuerpo, se caracteriza por cuatro fases sucesivas:
1. pródromo transitorio
2. fase latente
3. fase principal
4 restablecimiento
La primera fase que es la de pródromo transitorio, surge en cuestión de horas después de la exposición y dura más de 48 horas. En ella pueden detectarse los síntomas siguientes: anorexia, fatiga, fiebre, náuseas, transpiración, insuficiencia respiratoria y vómitos.
Esta primera fase va seguida de la etapa latente que es relativamente asintomática y puede durar hasta dos semanas.
La tercera, que es la fase principal, también es sintomática y en ella pueden aparecer los síntomas siguientes: agitación, anorexia, aspermia (falta de emisión de semen), ataxia, convulsiones, coma, diarrea, desorientación, depilación (pérdida del vello corporal) eritema, fiebre, hemorragia, íleo, infección, laxitud, bronceado, choque, debilidad y pérdida de peso. Dicha fase puede durar de dos a seis semanas.
La fase final, o de restablecimiento completo sin lesiones residuales por el síndrome de radiación, depende de la intensidad de la respuesta corporal a la exposición y de la dosis recibida.
TABLA 7 - 5 Efectos clínicos agudos de una fuerte dosis de radiación en todo el cuerpo en adultos sanos
Dósis (límites) | ||||||
Fase de la respuesta |
0--100 rads (limites subclínicos) |
-100-800 rads (limites letales bajos |
Más de 800 rads (límites supraletales) | |||
100-200 rads |
-200-600 rads |
600-800 rads |
800-3000 rads |
Más de 3,000 rads | ||
Respuesta inicial | ||||||
Incidencias de náuseas y vómitos |
0-5% |
5-50% |
50-100% |
75-100% |
100% |
100% |
Tiempo de asalto |
- 3-6 hr |
- 2-4 hr |
- 1-2 hr |
< 1 hr |
< 1 hr | |
Duración |
< 24 hr |
< 24 hr |
< 48 hr |
< 48 hr |
- 48 hr | |
Eficacia para combatir
|
100% |
< 80% |
puede ejecutar las labores de rutina; durante 6-20 horas no puede
llevar a cabo combate sostenido ni actividades similares |
puede realizar sólo labores simples de rutina; labores de simples
de rutina; incapacidad notable en la porción superior de los limites; dura más
de 24 horas. |
incapacidad progresiva después de una fase temprana de capacidad
para ejecutar una reacción heroica intermitente |
incapacidad progresiva después de una fase temprana de capacidad
para ejecutar una respuesta heroica intermitente |
Fase latente | ||||||
Duración |
más de 2 semanas |
7-15 días aproximadamente |
de ninguno a 7 días aproximadamente |
ninguno a 2 días aproximadamente |
ninguno | |
Respuesta secundaria | ||||||
Signos y síntomas |
ninguno |
leucopenia moderada |
leucopenia intensa; púrpura; hemorragia; infección; depilación
después de 300 rads y dósis mayores |
diarrea; fiebre perturbaciones; en el balance de
electrólitos |
convulsiones; temblor; ataxia, letargia | |
Momento del inicio después de la exposición |
2 semanas ó más |
de varios días a 2 semanas |
2 a 3 días | |||
Periodo critico después de la exposición |
ninguno |
4 a 6 semanas |
5 a 14 días |
1-48 horas | ||
Órganos y sistemas que la desencadenan |
ninguno |
sistema hematopoyético |
vías gastrointestinales |
SNC | ||
Hospitalización | ||||||
Porcentaje |
ninguno |
< 10% |
hasta 90% |
100% |
100% |
100% |
Duración |
45-60 días |
60-90 días |
90-120 días |
2 semanas |
2 días | |
Incidencia de muerte |
ninguna |
ninguna |
0-80% |
80-100% |
90-100% |
90-100% |
Tiempo promedio de la muerte |
3 semanas a 2 meses |
1-2 semanas |
2 días | |||
Terapia |
ninguna |
revisión hematológica periódica |
transfusión de sangre, antibióticos, reposo |
conservación del balance de electrólitos |
tratamiento de apoyo | |
Fuente: Reimpreso del NATO Handbook on the Medical
Aspects of Nuclear, Biological and Chemical Defensive Operations, AMedP-6.
Brussels, Military Agency for Standardization (MAS), August 1973, p.
6-8. |
No se conoce medicamento o tratamiento especifico alguno para curar el síndrome de radiación; y por ello las víctimas afectadas que han estado expuestas de cuerpo entero a neutrones o rayos gama reciben tratamiento paliativo para asegurarles una mayor comodidad. El padecimiento mencionado no es contagioso ni requiere de precauciones y aislamiento, salvo que la persona tenga heridas abiertas ya que en estos casos cabe utilizar aislamiento inverso para proteger al paciente.
Cualquier emergencia puede manejarse adecuadamente si las personas involucradas comparten la responsabilidad. Ninguna organización o instalación médica puede, por si sola funcionar como entidad separada, pues las actividades deben ser integradas en un todo. En caso de un accidente por radiación, las técnicas iniciadas en la escena de los hechos deben continuarse en todos los sitios en donde se reubique a las víctimas y a sus pertenencias. Dicha integración requiere del establecimiento de técnicas estandarizadas y una red de comunicaciones eficiente. Ésta incluye todas las actividades relacionadas con el tratamiento en el sitio de los acontecimientos, la selección médica y la transportación de las víctimas y su hospitalización (recuadro 7-1).
El manejo de actividades en el campo
La secuencia de las actividades en el sitio del desastre depende por completo de la situación que prive en el mismo. Los primeros pasos incluyen normalmente las medidas para valorar rápidamente la situación y solicitar auxilio. La evaluación incluye el reconocimiento de que existe una situación peligrosa, por medio de la identificación visual de las etiquetas adheridas a los recipientes.
En presencia de radiación hay que reducir al mínimo las labores, hasta que llegue el grupo de detección radiológica, y clausure inmediatamente el sitio del accidente. Mas aún, es necesario retener a todas las personas y sus pertenencias en el lugar de los hechos para realizar un control radiológico y cualquier tratamiento necesario. En una situación en que exista peligro de muerte para las víctimas habrá de transportarse inmediatamente a éstas mientras se toman precauciones para el manejo seguro de las personas contaminadas. Elabórese un registro de los pacientes y sus pertenencias en el sitio del accidente.
RECUADRO 7 - 1 Manejo del sitio en donde ocurrió un accidente radiológico
Primera persona que responde (por lo general paramédicos o personal de las ambulancias) · valorar la situación Autoridades (el hospital que recibe a la víctima) · notificar al personal de vigilancia radiológica |
Es necesario efectuar la selección médica (véase capítulos 3 y 4). A semejanza de las víctimas con traumatismo, las expuestas a radiación deben ser clasificadas médicamente; sin embargo, los sistemas de selección deben tener en cuenta la inclusión del estado radiológico de la persona (véase tabla 7-6).
Las unidades de rescate y las instalaciones médicas utilizan diversos sistemas de selección. Se concede la mayor prioridad a la atención médica de los pacientes con lesiones criticas y graves. Contrariamente a esto, en la atención radiológica puede darse prioridad a las víctimas sin lesiones o a las que no sufrieron daño grave. Sea cual sea el sistema, todos comprenden los siguientes aspectos:
· atención de las víctimas
· protección del socorrista
· protección del vehículo
· notificación de la instalación receptora
· documentación exacta
Más aún, durante todas las fases de selección y transportes hay que separar a las víctimas en dos grupos: contaminados y no contaminados. De modo similar, conviene utilizar al personal, los vehículos, el equipo y los suministros para uno u otro grupo.
El manejo en el hospital
Al llegar al hospital, las víctimas de radiación son recibidas en una entrada especifica del departamento de urgencias y allí se detecta su nivel de radiación. Recuerde que si existe alguna duda respecto a si la persona sufrió exposición o contaminación, habrá que tratarla siempre como si estuviera contaminada.
El hospital debe estar preparado para recibir y tratar a víctimas irradiadas, al establecer áreas limpias y contaminadas, sin embargo, cada paciente debe encontrarse estable en sus parámetros médicos antes de que se inicie el procedimiento de descontaminación.
Los objetivos de la descontaminación son:
· evitar daño causado por la presencia de sustancias radioactivas en el cuerpo
· evitar la propagación de la contaminación
· proteger al personal de asistencia contra la contaminación de su cuerpo o en algunos casos de que estén expuestos a una fuente de radiación
TABLA 7 - 6 Clasificación de las víctimas de radiación
Clasificación |
Gravedad de las lesiones |
Necesidades de atención |
Critica |
Lesiones mayores con compromiso de funciones
corporales |
Se desconoce la magnitud de la radiación; transportación
inmediata; tratamiento sin demora |
Atención de primeros auxilios en el sitio de los
hechos |
Se requiere tomar precauciones para el manejo de la víctima si
éstas no perturban la atención médica | |
Transporte inmediato |
Se precisa el grado de radioactividad en la víctima y se
descontamina cuando su condición clínica es estable | |
Grave |
Lesiones mayores y menores, compromiso mínimo de las funciones
corporales |
Los mismos cuidados que para el enfermo en fase critica en caso de
conocer el grado de radiación |
Atención menor en el sitio de los hechos |
Se toman las precauciones como aplicables en caso de conocer el
grado de radiación | |
Transportación, generalmente inmediata |
La descontaminación se realiza en la escena de los hechos por
órdenes del médico | |
No grave |
Lesiones menores; escaso o nulo daño de las funciones
corporales |
Rastreo de radiación y descontaminación, normalmente efectuadas en
el sitio del accidente |
Atención menor en el lugar de los hechos | ||
la transportación puede o no ser necesaria | ||
Tratamiento complementario |
No hay lesiones físicas |
Rastreo de radiación y descontaminación en el sitio del
accidente. |
Por lo general no se necesita atención en el lugar de los
hechos |
Todas las víctimas radiadas deben volver para recibir tratamiento
complementario | |
Fuente: Reimpreso de Bomberger AS, Dannenfelser BA:
Radiation and Health: Principies and Practice in Therapy and Disaster
Preparedness. Rockville, Md, Aspen Systems Corp, 1984, p
225. |
Es posible alcanzar de 90 a 95% de descontaminación al quitar la ropa de las víctimas. Dicha ropa debe ser colocada en bolsas marcadas y remitida a una sección alejada del área contaminada, para que más tarde personal calificado disponga de ella. La descontaminación restante se realiza lavando al paciente. Consúltese el recuadro 7-2 correspondiente al resumen de las actividades necesarias.
Cuando practique una revisión de monitoreo radiológico, en primer lugar, despeje a la víctima de sus ropas y sistemáticamente efectúe el monitoreo con un contador Geiger. De haber una herida abierta, debe limpiarse perfectamente el área y volver a monitorearla para determinar si hay presencia de radiación en la herida. Cuando monitoreo a una persona sin lesiones, pídale que permanezca de pie con las piernas separadas y los brazos extendidos. Comience desplazando el detector del contador Geiger sobre la cabeza, la porción superior del tronco, los brazos, la porción inferior del tronco y las piernas. Pida a la persona que se vuelva y repita el procedimiento por la espalda. Sin embargo, hay que tener cuidado de que el extremo del detector no toque las superficies potencialmente contaminadas. Pueden utilizarse técnicas especiales de monitoreo en las zonas pilosas y orificios corporales. Después de tratar a la totalidad de los afectados, se repite el mismo procedimiento para todo el personal asignado al área contaminada.
Un accidente o desastre radioactivo puede cobrar muchas víctimas o un número reducido de ellas. Si el número de víctimas sobrepasa las capacidades de un área de emergencia, la situación se torna rápidamente en desastre, incluso cuando exista una sola víctima. Sin embargo, esta clasificación depende del empleo y la utilidad de un PEMR Los componentes de dicho plan están escritos en el recuadro 7-3.
Una vez que se ha creado el plan mencionado, debe utilizarse para capacitar al personal, y también es necesario corroborar su eficacia por medio de simulacros que incluyen supuestas "víctimas contaminadas". Para que dicho plan rinda buenos resultados es indispensable capacitar al personal del departamento de emergencias y de auxilio, así como a todas aquellas personas que intervienen en la respuesta al desastre.
La atención comprensiva y adecuada de las personas radiadas, el manejo del departamento de urgencias y los conocimientos de seguridad de quienes prestan los servicios, requieren de técnicas y procedimientos perfectamente coordinados por todos los que intervienen en las actividades. Cuando se elaboren los protocolos para atender a las víctimas de radiación, algunos de los aspectos que es necesario considerar incluyen:
· atención medica y de enfermería
· atención radiológica de la persona
· protección del personal y del entorno
· limpieza del área
· documentación del hecho.
RECUADRO 7 - 2 Actividades de urgencia que debe relizar el personal del departamento de emergencias del hospital en un caso de radiación.
1. Al recibir el aviso de la llegada inminente de la víctima de un accidente de radiación, notificar: al personal responsable médico, a la enfermera, al personal médico auxiliar (físicos en salud y técnicos capacitados en radiología y medicina nuclear) y al administrador de la institución 2. Obtengan las muestras que se requieren de los suministros necesarios para tratar a los pacientes de este tipo 3. Prepárese para la descontaminación · Asigne las áreas de tratamiento y señálelas con los nombres "contaminada" y "limpia". 4. Al llegar las ambulancias proporcione los primeros auxilios El miedo a la contaminación nunca debe entorpecer la atención médica y de enfermería necesaria para salvar vidas y miembros. 5. Revise a las víctimas para determinar su grado de contaminación · Separe a los pacientes contaminados, de los no contaminados. 6. Identifique y guarde todos los efectos personales y desechos corporales para análisis. 7. Descontamine a las víctimas tan pronto su estado clínico sea estable: · En primer lugar descontamine las zonas del cuerpo que presenten los mayores niveles de radiación 8. Programe a todos los pacientes contaminados para que reciban tratamiento complementario a largo plazo. 9. Conserve a los pacientes en el área limpia hasta que se confirme que no tienen contaminación. 10. Examine a todo el personal en busca de contaminación antes de permitirle salir del área. 11. Descontamine al personal, si es necesario 12. Deseche el equipo y los suministros de acuerdo con los procedimientos recomendados, y descontamino todas las áreas de tratamiento, después del desastre. Fuente: Bomberger AS, Dannenfelser BA: Radiation and
Health: Principies a Practice in Therapy and Disaster Preparedness.
Rockville, Md, Aspen Systems Corp 1984, pp. 219-230. |
RECUADRO 7-3 Descripción del plan de emergencias radiológicas
1. Información general A. Definición de los términos utilizados II. Tipos de víctimas de radiación A. Exposición externa total o parcial del cuerpo. III. Contaminación externa complicada con una muestra de las formas por utilizar A. Forma de respuesta a un accidente de radiación. IV. Procedimientos del hospital A. Cadena de mando y responsabilidades. V. Disposición de los materiales y el equipo contaminados. VI. Copia del procedimiento local de operación estándar, como
parte de un pro grama de urgencia contra radiaciones de la
localidad. |
El establecimiento de un área dentro del departamento de urgencias o junto a éste no tiene que ser una tarea abrumadora ni costosa. Entre las áreas que pueden funcionar adecuadamente como zonas de selección de víctimas por radiación están; el departamento de hidroterapia, el depósito de cadáveres o cualquier combinación de cubículos o pasillos. Es esencial que exista acceso directo a dicha zona desde el exterior, para así proteger el entorno del hospital. Tampoco se requiere que sus paredes estén revestidas de plomo. Sin embargo, es conveniente escoger un área que tenga paredes pintadas y piso de linóleum o de azulejo, para después facilitar su descontaminación, También debe contarse, de preferencia, con un sistema de aire acondicionado que opere aislado de los demás; no obstante, es posible colocar filtros normales para aire acondicionado o limpieza, en los orificios de salida de la zona escogida para la selección.6
Se necesitan tres tipos de suministros en esta área:
1. un carrito estándar con material de urgencia y equipo especifico para tratar lesiones traumáticas
2. suministros para manejar al paciente contaminado
3. suministros de materiales para muestreo de radiación
Estos suministros pueden estar depositados con anterioridad en dos tipos de carritos: 1) el carrito estándar para urgencias, y 2) carrito con suministros para tratamiento en caso de radiación, los cuales son relativamente baratos. (Tabla 7-7). Éste último debe colocarse en la zona de selección de pacientes por radiación denominada sectores "sucia o contaminada". Para regular el tránsito es de máxima importancia establecer sectores perfectamente definidos dentro de la zona designada para selección de víctimas por radiación (véase la figura 7-1).
TABLA 7 - 7 Suministros para el carrito de tratamiento en caso de radiación
Uso |
Suministros* |
Atención del paciente |
Ropa blanca (desechable de ser posible): toallas, sábanas, paño
para lavarse la cara o el cuepo, batas, repones, zapatillas, mantas etc. Equipo
y material de limpieza: jabón o el agente limpiador recomendado; mecanismo para
la conexión con un suministro de agua (de preferencia regadera), bacines,
soluciones isotónicas, jeringas de irrigación, cepillos con cerdas
suaves |
Análisis de muestras de radiación |
Material para la obtención de muestras: etiquetas, recipientes,
requisiciones |
Protección ambiental |
Plástico o papel para cubrir el piso |
Detección de radiación |
Instrumentos de rastreo, contadores o dosímetros |
Protección para el personal |
Gorros Mascarillas de cirugía |
Aspectos diversos |
Artículos para escritura y papel |
Nota:* Los artículos para la atención de la víctima deben
separarse o eliminarse del carrito, a la zona limpia antes de llegar los
pacientes. |
Esta área debe tener acceso directo desde el exterior para recibir a las víctimas de radiación y así eliminar la posibilidad de contaminar a todo el medio del hospital. Las personas radiadas son internadas directamente al área de tratamiento "sucio" o contaminados, en donde se les proporcionará atención médica inmediata a aquellas que se encuentran en peligro de muerte. Una vez que su estado médico es estable, se les efectúa un monitoreo en el área de descontaminación para que se les realice una limpieza. Esta zona cuenta con las instalaciones de agua y regaderas portátiles necesarias en caso de estar disponibles. Una tina portátil y ligera puede unirse a una camilla común y corriente, lo cual representa un método conveniente, porque para limpiar a una víctima no ambulatoria, al mismo tiempo permite recolectar el agua sucia que contiene material radioactivo. Conviene modificar cuando menos una camilla para utilizarse de esta manera en el procedimiento de descontaminación.7
FIGURA 7 - 1 Area de tría de
Radiación en el Hospital
Si se requiere tratamiento médico, la víctima pasa al área "limpia" de tratamiento después de que se le practicaron el rastreo con el monitor y la descontaminación. Si no necesita atención, pasa al área del hospital general después de efectuársele otro "rastreo" radiológico. Todo el personal que necesite descontaminación debe recibir el mismo tratamiento antes de penetrar en el área hospitalaria o de retornar a la comunidad.
Vivimos en un medio saturado tanto de radiación natural como provocada por el hombre. Estas fuentes radioactivas producen partículas alfa, beta y rayos gama. Los neutrones pueden observarse sólo en un reactor comercial o de investigación, o en caso de una guerra nuclear.
La víctima de radiación que con mayor frecuencia atiende la enfermera es la que proviene de un accidente de transporte. Se necesitan procedimientos especiales para su manejo, pero la atención médica no debe demorarse por el temor injustificado de radiación. Dicho temor puede reducirse por medio de un programa de orientación y enseñanza perfectamente planeado e implantado que destaque los métodos de monitoreo, los procedimientos de descontaminación y el conocimiento de los diversos tipos de radiación.
El manejo asistencial de la persona radiada requiere criterio sólido en la selección, sentido común en las técnicas de descontaminación, un sistema de clasificación radiológica, y áreas especificas de asignación del personal. Sobre todo, requiere de la programación previa y la existencia de un plan médico de emergencia en caso de radiación perfectamente integrado y practicado en simulacros.
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