cerrar esta libroDesastres Preparativos y Mitigación - Boletín No. 09 - Octubre, 1981 (Pan American Health Organization (PAHO) / Organización Panamericana de la Salud (OPS), 1981, 8 p.)
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Programas nacionales de preparativos para casos de desastre

Cuando el huracán Flora abatió Cuba en 1963, el país no estaba preparado para enfrentar las consecuencias. Miles de personas quedaron aisladas por las inundaciones que cubrieron bajo agua a grandes extensiones de territorio. Solo las fuerzas armadas disponían de los medios de transporte y del personal adiestrado necesario para llevar a cabo las operaciones de rescate. Como consecuencia de esa experiencia, fue elaborado el Plan de Aseguramiento Médico Contrahuracanes e Intensas Lluvias, cuya premisa es la evacuación preventiva de la población en riesgo. Recalca, asimismo, la importancia de asegurar la autosuficiencia operativa a nivel provincial y municipal. A continuación presentamos los aspectos principales del Plan en forma resumida. Fueron usados como referencia materiales proporcionados por el Dr. Eddy Gómez, Ministerio de Salud Pública. 23y N Vedado. La Habana. Cuba.

Actividades previas al desastre

Las actividades previas al desastre se dividen en tres fases: estudios de vulnerabilidad, adiestramiento de personal, y ensayos y evaluación de los planes de evacuación.

Las provincias están encargadas de preparar sus propios estudios de vulnerabilidad en relación con el riesgo de inundaciones. En ellos se incluyen no solo los datos meteorológicos y topográficos, sino también información sobre la distribución de la población, su composición por edad, presencia de ganado u otros animales, ubicación y estado de puestos de salud, escuelas que se pueden emplear como posible albergue, etc. Estos estudios de vulnerabilidad son verificados por personal del Ministerio de Salud.

En la primera parte del plan se resumen las características de la provincia o municipio y la organización para asegurar la atención médica de la población. Describe brevemente, asimismo, el régimen especial de trabajo, las medidas higiénicas y epidemiológicas, y la organización del abastecimiento médico y de la evacuación de heridos y enfermos, aspectos que entran en vigor en el sector salud durante una emergencia. Al final, se proporcionan documentos complementarios que sirven de guías de trabajo para el personal de salud que participará en las operaciones de preparativos y socorro.

Plan Calendario

El éxito de las medidas que se han tomado en desastres posteriores al huracán Flora, quizá se deba más que nada a la ejecución del Plan Calendario, el cual está dividido en cuatro fases declaradas formalmente por las más altas autoridades nacionales: informativa, alerta, emergencia, y recuperativa.

La fase informativa - entra en vigor cuando las condiciones meteorológicas indican que existe el peligro de un posible huracán o de lluvias torrenciales. Las medidas incluyen localizar el personal a todos los niveles, suspender las vacaciones y permisos, realizar el censo de camas disponibles y recuento de pacientes hospitalizados a los que se puede dar alta, y crear las condiciones para la movilización inmediata de las brigadas sanitarias. A la vez, el estado mayor de los servicios médicos se reúne para puntualizar las medidas a cumplir. En esta fase se ejecutan las medidas higiénicas preliminares, como la reinspección de albergues, centros de alimentación colectiva, fuentes de agua, etc. Se revisan las existencias de medicamentos y suministros médicos y, de faltar alguna, se solicitan al nivel superior.

Una vez que las autoridades centra les declaran la fase de alerta ciclónica (la cual indica que el ciclón amenaza con pasar por el territorio, o cerca del mismo, dentro de 48 horas), se movilizan refuerzos y reservas a los lugares indicados y se crean las condiciones para que pasen al régimen especial de trabajo los hospitales, policlínicas, empresas, etc. Se determina a la vez el acondicionamiento de los locales designados como albergues, puestos médicos, puestos sanitarios, etc. Con el objeto de liberar del 20 al 30% de las camas, se da alta o pase a los pacientes previamente seleccionados y se suspenden los ingresos e intervenciones quirúrgicas no urgentes.

La fase de emergencia ciclónica (anunciada cuando se estima que el ciclón afectará al país dentro de 24 horas), es cuando se inicia la fase de socorro, en la que cada unidad realiza las medidas previstas que le corresponden. En esta fase se lleva a cabo la evacuación preventiva, que es la medida principal. Las condiciones geográficas y sociales de Cuba facilitan la rápida y ordenada movilización de la totalidad de la población amenazada, ya sea rural o urbana.

La última fase del Plan Calendario, la recuperativa, tiene el fin de restablecer las condiciones normales de vida lo antes posible. Se mantienen las medidas de asistencia médica a los evacuados mientras estos permanecen en los albergues. A medida que las condiciones lo permitan, se comienza la desmobilización progresiva del personal.

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